¿Hacerte extranjero? Si puedo elegir, ¡No, gracias!

Llega la época de hacer recuento del año, de ver si ha sido positivo o negativo…
¡Vamos, de hacer balance, en una palabra!
Y no solo somos nosotros si no también las empresas de nuestro país, que se guardan sus mejores bazas para esta época del año, para lanzar sus mejores campañas en los últimos días que quedan de 2013. Campofrío lanza una nueva campaña que se llama ¿hacerte extranjero?, y la verdad es que no me ha podido gustar más, como viene siendo habitual desde hace ya varios años con sus anuncios!
Quizás es porque cumplo todos y cada uno de los topicazos que se nombran en el anuncio, sí, como ese de hablar a gritos “es que no me oigo” digo yo, o el de besuquear a los que quieres sin parar, o el de sentarte pegaito, pegaito al lado de un amigo, o el de cocinar para tres y que al final puedan comer 33, que como bien me dice mi compañera francesa: “no entiendo esa manía de los españoles de hacer comida para tanta gente, sí sois cinco, sois cinco” me dice ella, o el de las tecnologías, que sí, que tengo un Smartphone, pero que lo que me gusta es estar de cañas con los amigos y quedarme hasta el final, o el humor negro y ácido que me caracteriza, ese de exagerarlo todo, o el de luchar aunque no tengas fuerza, que me levanto todas las mañanas con ganas de empezar de nuevo y defiendo mi trabajo a capa y espada, aún sabiendo de que el próximo año vas a ganar menos que el anterior; o el de saber que vives en un país que está a la cola de todo: educación, la de la universidad y la de casa, vivienda, sanidad, economía… pero que sin embargo, los que nos quedamos, porque hemos podido, creemos que vamos a mejorarnos, creemos en nosotros mismos, creemos en que vamos a salir de esto, creemos en España, creemos en la fuerza y el coraje que siempre hemos tenido. Y como dice Chus Lampreave: “algunos le llaman carácter o ¡cómo somos!, no lo tiene todo el mundo, no, no, no” es esa manera de ser nosotros mismos, de ver siempre el vaso medio lleno y si es pá compartirlo, más lleno todavía, es eso que dice nuestra cómica…
” Uno puede irse, pero no hacerse”
Los jóvenes podrán emigrar, podrán vivir en países “chachis”, en países que pertenezcan al G-8, en países donde no haya crisis, ni sean naciones de pandereta, como la nuestra, países donde los que trabajamos duro, sean recompensados por el esfuerzo, en países donde “todo dios te deba dinero” o dónde, quizás, se viva mejor, pero esos jóvenes nunca podrán hacerse ni suecos, ni franco rusos, ni italianos, ni alemanes, ni jamaicanos, ni ingleses… porque nuestros jóvenes Siempre, Siempre, serán ESPAÑOLES.
Lo único que me cabe esperar es que nuestra esencia, nuestro “como somos”, aunque algo maquillado, esté dando la vuelta al mundo, y que sean cada vez más, los franco rusos, los alemanes, los belgas o los suecos, los que se animen a ver el vaso siempre medio lleno, que sean capaces de preparar comida para tres y sobretodo, que vean que los que se han ido y los que nos hemos quedado tenemos “carácter” para salir de esto juntos, ya sea desde Berlín o desde Londres o desde Moscú.
Un año más, gracias a Campofrío por haberme sacado una lagrimita navideña y por hacerme sentir parte de esta España de pandereta, que estoy segura que sabrá aprender de sus errores.

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